CAPITULO 1.

PERMITAN QUE ME PRESENTE

“Under pressure" -Queen.

Supongo que debería comenzar por hablar un poco de mi. ¿Qué puedo decir?. Vivo en una guarida triste y oscura, rodeado de unos superordenadores analógicos al estilo de la estrella de la muerte (que juntos probablemente no tengan la capacidad de un spectrum de los de cinta), y mi único amigo es una rata con cabeza humana que me llama “amo”, o “milord” y que siempre anda quejandose de lo horrible que es que no la acepten las otras ratas.

Bueno, antes tenía mas amigos, …, dejame pensar,…., estaba ese tipo que vivía en un castillo, ¿Cómo se llamaba?, …., Victor, creo, y su apellido era algo así como topoterstein o frankfurtstein, bueno, uno de esos apellidos judios.

Pobre, creo que oí decir que unos okupas aldeanos le quemaron el castillo o algo así.

Luego estaba ese otro, el calvo, su nombre tenía muchas eles. Lex Luthor. Por lo menos ese era rico, tenía una macrocorporación y andaba trasteando con no se que piedra verde.

Murió de cancer el año pasado. Algo debido a la radiactividad. Al funeral somo fuimos yo y un tipo en pijama azul y con los calzoncillos por fuera.

Y bueno, luego están todos esos del sindicato de villanos. Que no puedo decir que sean mis amigos pero al menos nos vemos una vez al mes para pagar la cuota y quejarnos del recibo de la luz (un villano gasta mucho en luz, ¿o acaso creen que esos Teslas gigantes que dan esos rayos tan chulos van con 220).

Pero tampoco es que seamos intimos porque hay cada cual que…., bueno:

Estan los del genotipo “monstruo horrendo con sentimientos”, pero apestan a alcantarilla y se pasan todo el día llorando por que la vecinita de turno no les hace caso.

Luego estan los del tipo “monstruo idiota”, estos apestan a alcantarilla, suelen defecar donde mejor les parece (como la fuente del ponche o la bandeja de bocadillos) y por lo general siempre lo andan rompiendo todo.

Tambien tenemos, fuera de los monstruos a los del estilo de “esta es mi triste historia”. Son los tipicos desgraciados que no pueden andar contando lo infelices que son y justificandose por sus terribles actos, mientras tanto la maquina de matar innecesariamente lenta se para y el heroe pues va y se escapa y les pega una paliza o les tira al tipico estanque de los tiburones.

Y finalmente están los “sonados”, son esos que en pocas palabras: están como una puta cabra. Siempre andan matando a sus propios secuaces y frotandose las manos entretenidos en un plan para destruir el mundo sin percatarse del hecho de que lo destruirán con ellos dentro. El unico que conozco de estos que tiene un plan mas o menos coherente pretende huir a Marte en una nave espacial construida con bolsas de basura.

Si, ya sé que se estarán preguntando en donde encajo yo. Bueno, realmente yo me metí en esto por seguir con el negocio familiar mientras intento sacar unas oposiciones.

Ah, claro, y luego tambien está la chica, casi todos los villanos están relacionados con una chica, bueno, quiero decir que en casi todas sus historias sale una chica. Porque relaciones lo que se dice relaciones casi ninguno tiene muchas. Para ser sinceros la inmensa mayoría mojan menos que el fan medio de Star Wars.

Pues bien, mi historia tambien tiene a una chica. Es ese tipo de chica que casi todo el mundo definiría como que “tiene carácter” cuando realmente quiere decir “creo que el fuego, balas de plata y agua bendita podrían con un poco de suerte devolverla al infierno”.

Y esta buena claro. No sé describir exactamente como es. Bueno, no tiene los ojos azules, ni es rubia, ni se pasa el día pegando esos chillidos ultrasónicos que todo buen villano sabe apreciar, del estilo de “socorro, socorro, oooohh noooooo, que alguieeeen meee salveeee”. A decir verdad creo que lo mas probable que dijese fuera, “soplapollas, o me desatas ahora mismo de esta mierda de maquina de la muerte o me voy a tener que desatar yo y eso va a ser peor”. Y por extraño que parezca uno acabaría creyendose que realmente sería peor que la maquina de la muerte en la que llevas trabajando 20 años. Por otra parte como ya he dicho sus ojos no son azules, y no sabría decir si son bonitos. De lo que estoy seguro es que son de la modalidad que traspasa tu cara y remueven el centro de tus pensamientos como si fuese sorbete aderezado con tus huevos a modo de cubitos. Por supuesto las palabras “mujercita desvalida” nunca irían en una frase que tuviese que ver con ella.

Porque tal y como dijo alguien cuando un mono de 500 kilos se cayó del Empire State Builiding:

"Fue la belleza lo que mató a la bestia".